Eran las 17 horas y los talleristas ya estaban listos, pero más listos estaban los vecinos a quienes se les impartiría el taller. En la casa de doña Patricia Vázquez. Siete adultos y diez niños de entre 4 y 10 años participando desde la primera etapa del taller. Inició con la explicación de qué es El Coyote Itinerante llevándonos la grata sorpresa de que la revista ya era conocida por algunas de las amas de casa.

Nos dimos cuenta que en esta comunidad existen aspectos agradables y desagradables, mas como integrantes de la misma aprendimos que debemos convivir con todos ellos. Pues las personas aportaron con sus opiniones luz de la forma en cómo se miran en su comunidad. Nos despedimos de las familias que muy atentamente nos recibieron pero con el compromiso de regresar nuevamente a otra visita del Coyote Itinerante. Ellos ya son parte del equipo.